Múltiples situaciones ocurren a diario, a modo de ejemplo podemos mencionar: - Falta de capacitación (en función que estaba realizando o en la prevención de riesgos) - Utilización de maquinarias o herramientas defectuosas o sin mantención adecuada. - Falta de equipos de protección individual (cascos, botas, guantes, arnés etc) - Falta de medidas de seguridad colectivas (vallas de protección, redes de seguridad, etc) - Realización de labores distintas a las especificadas en el contrato de trabajo - Falta de higiene industrial en la zona de trabajo - Culpa de un tercero (compañero de trabajo, cliente etc) - Cualquier otra circunstancia que no sea culpa del trabajador.